Mostrando entradas con la etiqueta Zoe Félix. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Zoe Félix. Mostrar todas las entradas

jueves, 30 de agosto de 2012

"Je prefère t´acheter de l´alcool moi même, 
que tu bois mon Givenchy".

Bienvenue chez les ch´tis. (2008)
La necesidad hace extraños compañeros de viaje. Esta película aborda varios tópicos o prejuicios: la gente del sur y la gente del norte, los capitalinos y los provincianos. Un director de Correos, Philippe Abrams (Kad Merad), tras intentar mediante trampa conseguir un destino de la Costa Azul es castigado con dos años en Bergues, en la región Nord-Pas-de-Calais. Los habitantes de esa última frontera con Bélgica son los ch´tis que hablan todos ch´timis, una variante local del francés que establece cambios en las vocales, con sus propias coletillas, giros y locuciones. El primero en recibirle es Antoine Bailleul, interpretado por Dany Boon, actor y también director de esta cinta que en pocos años ha promovido un giro de la comedia francesa hacia la inocencia primaria de la risa, obviando sarcasmos, cinismos o excesos de ingenio pretencioso. Lo que se planteaba como un castigo acaba siendo una ocasión para revisitar la cara amable de provincias, la cercanía con el usuario, la camaradería, la generosidad humana y la calidad de vida en su aspecto más universal. Y de paso servir como pasaporte turístico a todas las posibilidades de esa región alejada de los objetivos turísticos franceses. Tras un primer momento de negación, Philippe se abre al lugar y a la gente, se adapta a su lengua y costumbres y se vincula a su suerte. Su mujer Julie (Zoé Félix) no admite que el destino no sea sino el horror mismo y Philippe lleva una doble vida entre el disfrute de sus compañeros y luego amigos del trabajo y la fantasía que desean escuchar en su casa de Salon. Pero esa construcción se viene abajo cuando su mujer decide reunirse con él en su nuevo destino. La cinta está llena de situaciones desternillantes que alcanzan su clímax en la farsa en el pueblo minero. Kavafis lo tenía claro cuando dijo algo así como "la vida que has gastado en esta ciudad, la has perdido en toda la tierra". Uno debería aprender siempre a sacar lo mejor de cada lugar o situación pasajera de su vida porque para bien o para mal la escritura vital no se detiene jamás. Y todos tenemos posibilidad de mejorar y ser mejorados por la vida de aquellos con los que por un tiempo son nuestros coincidentes laborales.